
“Las musas te tienen que pillar trabajando” con esta frase tan potente presentamos a nuestra invitada Sara López.
Sara es una compositora de bandas sonoras de videojuegos cuya pasión por la música nos transmite nada más presentarse.
Ha trabajado en diversos proyectos y compuesto ya no sólo para algunos videojuegos sino también largometrajes.
Actualmente no sólo se dedica a este ámbito sino que se ha animado a realizar un patreon para aquellos que disfruten del rol. Ahora podéis buscar aquella melodía que se adapta mejor a vuestra partida.
Las bandas sonoras son esenciales cuando hablamos de videojuegos y estoy segura que al leer esto os viene a la mente aquella melodía que significo un antes y un después.
La música ha pasado a formar parte de un elemento esencial cuando hablamos de un videojuego, un elemento que nos acompaña y nos envuelve. Que nos avisa del peligro de una posible batalla o que nos envuelve de epicidad en nuestro momento más álgido.
Manaka Kataoka, Marcin Przybyłowicz, Gareth Coker, Kōji Kondo, Sonya Belousova son algunos de los compositores mencionados dentro de este episodio.
Todos tenemos bandas sonoras de videojuegos favoritas que nos acompañan.
Ahora bien,

¿Qué derechos tienes como compositor musical?
Según la Ley de Propiedad Intelectual (artículo 10.1) las composiciones musicales están protegidas bajo esta normativa (tengan o no tengan letra).
Por lo que enhorabuena vas a estar amparado por el paraguas de la propiedad intelectual
Ahora bien, para que entiendas que se entiende por composición musical debes saber que esto engloba:
Las partituras, las letras, las tablaturas y todo lo relacionado con una pieza musical.
Pero ¿y cuándo se canta o se interpreta dicha melodía?
Pues bien, aquí tenemos que separar.
Los cantantes o intérpretes sí que tienen unos derechos pero estos no están relacionados con la autoría.
Ahora bien, puede ocurrir que el que compone y el que interpreta la melodía sean el propio autor. Vease el caso de cantantes como Taylor Swift, John Lennon y Paul McCartney, Ed Sheeran, Lady Gaga etc.
No obstante, a veces estas figuras son diferentes. (Por ejemplo Frank Sinatra que es un icónico de la música algunas canciones no fueron compuestas por él).
Ojo, que ambos no están exentos de derechos, sólo que van a ser diferentes. Uno relacionado con la autoría y otros con lo que en propiedad intelectual conocemos como derechos conexos.

Aviso a navegantes porque más de una vez ha ocurrido.
Imaginemos la siguiente situación un programador y un ilustrador deciden unirse para realizar un videojuego pero, se dan cuenta que les falta la música. Por lo que contactan a un colega que tiene un estilo que les mola muchísimo.
Ahora bien, se lo encargan y no ponen nada sobre los derechos de explotación de la música en las clausulas o peor (pesadilla de todo abogado) aun no han realizado un contrato con esta persona.
Pues sabed, que si un día os dice el compositor que no quiere que lo publiquéis en ciertas plataformas o que no quiere que lo distribuyáis esta en todo su derecho. Porque él no os ha cedido las explotación de esa obra musical
Por lo que siempre realizad un contrato y dejad claro estos puntos. Que os cede, que no os cede, durante cuánto tiempo y dónde.
Tened claro si os deja el derecho de reproducir, distribuir y comunicar dicha composición musical.
Lo mismo a los compositores, mirad siempre los clausulados y tened claro lo que estáis firmando.
También en el caso de que queráis que se explote vuestra música del videojuego pero queréis que vender a parte vuestra música podéis establecer unas licencias de uso.
Es decir, podéis darle permiso para que lo hagan dentro de los parámetros que vosotros queráis.

Licencias creative commons
Existe también la posibilidad de utilizar este formato para explotar vuestra música y vosotros fijáis lo que pueden o no pueden hacer los usuarios.
También como decimos en el podcast, sed agradecidos con quienes os dejan disfrutar de esta música a través del sistema de licencias.
Creemos la buena práctica de dar las gracias que hay muchas horas de trabajo detrás de cada obra.
Ya lo decía Sara, la emoción que se siente al alguien reconocer ese esfuerzo y trabajo es una retribución enorme.
Un simple gracias no cuesta nada y da muchísimo.
También si encontráis una melodía que queréis utilizar para vuestro videojuego y resulta que el autor no permite su explotación comercial siempre intentad hablar con el creador.
Porque a lo mejor podéis llegar a un acuerdo para que podáis incorporarlo.
Y si no os deja, pues no pasa nada. Ya encontrareis otra melodía que se adapte.
Conclusión.
Hay mil cosas que podemos tratar cuando hablamos de música. Ya no sólo sobre quien tiene que derecho sino también cuando se produce la distribución musical quien se encarga de qué y quien te da qué.
Otro tema que no hemos tocado es el de la sincronización musical que puede dar para otro post entero.
Lo que está claro es que la industria de la música es bastante complicada y a veces tenemos que tener en cuenta mil cosas.
También si habéis llegado hasta aquí gracias por vuestro tiempo y seguid a Sara (podéis encontrarla como Sara Lopez Productions) que es una persona majísima (como buena tinerfeña) y una pedazo de profesional.
